Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) iniciará antes del verano la renovación de todos los raíles de la vía Palma-Inca con el objetivo de aumentar la velocidad de los trenes. Esta actuación forma parte de un proyecto de rehabilitación y adecuación de los tramos ferroviarios Palma-Inca e Inca-sa Pobla que el consejo de administración de la empresa pública del Govern aprobará el día 27, según anunció ayer la consellera d'Obres Públiques, Mabel Cabrer, y el gerente de SFM, Rafel Pons. Los raíles de la línea Palma-Inca tienen más de 20 años y presentan serios desperfectos (garrotes) debido a la dilatación de la vía. El proyecto prevé sustituir el carril de 45 kilogramos por otro de 54 kilogramos, además de cambiar las traviesas de madera por otras de hormigón en los desvíos. Los trenes del Govern tienen capacidad para alcanzar los 100 kilómetros por hora, según indicó Rafel Pons, pero en estos momentos se reduce a 60 kilómetros por hora en los tramos más defectuosos de la vía. «El problema después es volver a arrancar», agregó. El cambio de los raíles contribuirá a elevar la velocidad de los ferrocarriles y aumentar la frecuencia de los servicios del tren. Esta obra costará 10 millones de euros.
Serveis Ferroviaris aprovechará estos raíles para ampliar la playa de Son Rullán con cinco vías más. Además, se crearán vías muertas en las estaciones de Santa Maria, Marratxí, Binissalem y la playa de vías de Inca, donde se podrán estacionar los trenes averiados dejando libre la línea. Mabel Cabrer destacó también el proyecto de doble vía con el sistema de vía en placa en tres kilómetros de tramos urbanos del tren para evitar las vibraciones en las viviendas cercanas. Este sistema, utilizado actualmente en varios tramos del AVE, se aplicará en 600 metros de la estación de Son Rullán a Palma y desde la estación del Pont d'Inca hasta Cas Maiot (aproximadamente hasta Alcampo). La sustitución por la vía en placa tendrá un presupuesto de 4,1 millones de euros.El proyecto de mejora de la línea férrea Palma-Inca también proyecta sustituir las agujas del tren para mejorar la seguridad y prolongar la conducción por telecomunicaciones en el tramo Enllaç-sa Pobla. El conjunto de estas obras comenzará antes del verano, según precisó Cabrer, y se prolongarán durante un año. En principio, no está previsto que las obras alteren los servicios y para ello se realizarán trabajos por la noche y los días festivos. «Lo único que puede provocar algún retraso será la instalación de la vía en placa, en que el trabajo tiene que ser diurno. Como hay doble vía y se tendrá que usar una», subrayó Cabrer. La Consellera calcula que será 2005 cuando se regularice el servicio de las líneas a Inca, sa Pobla y Manacor, que en la actualidad sufren importantes retrasos. Además de arreglar las vías, el Govern tiene previsto suprimir los pasos a nivel y la adquisición de 10 coches más que llegarán a la Isla dentro de 17 meses. «A partir de este año, podremos afrontar el aumento de frecuencias a Manacor y la apertura de nuevas líneas como la de Alcúdia». SFM estudia en estos momentos el soterramiento de las vías del tren en Palma y la nueva línea hasta la UIB.