Tres vuelos cancelados, todos ellos de la compañía Spanair, y 56 operaciones con retrasos medios de hasta cerca de dos horas, fue el balance ayer de la intensa niebla que afectó al aeropuerto de Palma y al de Barajas durante las primeras horas de la mañana, así como de los efectos derivados de la jornada de huelga convocada por los controladores italianos, según fuentes de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA).
La intensa niebla afectó al aeropuerto palmesano entre las 08.00 y 09.00 horas, circunstancia que provocó retrasos en los enlaces de la compañía Air Nostrum con los aeropuertos de Maó y Eivissa. Estos problemas también han afectado a los aeropuertos de las islas menores, ya que se contabilizaron retrasos en cinco y diez operaciones en Maó y Eivissa, respectivamente.
A medida que fue transcurriendo la jornada e incrementarse los problemas de saturación en Barajas, las compañías aéreas se vieron obligadas a variar su programación, de ahí que Spanair decidiera cancelar tres vuelos para no entorpecer su operativa hacia otros destinos. En cuanto a los 56 vuelos afectados por retrasos en vuelos con origen y destino en Palma (38 de entradas y 18 de salida), indicar que en once de los cuales se superó la hora de demora. El retraso máximo, tanto para los despegues como para los aterrizajes, se situó en la hora y los 55 minutos. Los vuelos de entrada que sufrieron retrasos provenían de MAdrid, Munich, Viena, Stanted (Reino Unido) y Hamburgo (Alemania).