La Germandat de Donants de Sang de Mallorca celebró ayer en Son Termes su tradicional cena de Navidad para agradecer a todos los colaboradores y voluntarios de la asociación (cerca de 500) su dedicación.
Cerca de 400 invitados asistieron a la cena, entre ellos la consellera de Salut, Aina María Castillo; el presidente de la Fundación Banco de Sangre y Tejidos, Jaume Orfila; el gerente de la misma, Victor Gistau; el presidente de la Hermandad de Donantes, Llorenç Vallori, y numerosos alcaldes de la Isla.
Durante la cena se hizo entrega de una placas de agradecimiento al presidente de las peñas del Real Mallorca de Binissalem, Alcúdia y Campos, Miguel Garro.
Asimismo, se entregaron cerca de 20 carnés a nuevos colaboradores.
En la cena se contó una rondalla y, después de la misma, tuvo lugar un baile en las mismas dependencias de Son Termes.
Victor Gistau, gerente de la Fundación de Tejidos y Sangre de Balears, destacó en su discurso de ayer su «total entedimiento y defensa de las asociaciones altruístas de la Isla, con el fin de llegar a la autosuficiencia». De la misma manera destacó su compromiso «en la permanente puesta al día del personal de la Fundación y de la Hermandad, a través de cursos de formación». Gistau recordó que recientemente la Sociedad Español de Transfusiones Sanguíneas de Granada otorgó un premio a la Fundación por su «alta capacidad profesional para promocionar la donación en las Islas». Gistau recordó de manera muy especial que «la apuesta pionera del Govern al no elegir como presidente de una Fundación de Tejidos y Sangre a un hematólogo», de momento «ha dado unos resultados excelentes. Los meses de noviembre y diciembre han sido los mejores de estos cinco últimos años. Por tanto se certifica el acierto de esta pionera y única experiencia en España», aseguró.