J.M./S.C.
El Govern balear firmará antes de Navidad un protocolo con el
Ministerio de Defensa para convertir el antiguo Hospital Militar de
Palma en una residencia para mayores asistidos con 72 plazas y un
coste global de 7,2 millones de euros que las arcas del Ejecutivo
autonómico tiene previsto pagar en cinco años. Así lo confirmó ayer
la vicepresidenta del Govern y consellera de Relacions
Institucionals, Rosa Estaràs, en el encuentro de la Comisión
Interdepartamental Sociosanitaria de Balears que ayer se reunió
coincidiendo con la celebración del día europeo de las personas
discapacitadas.
Estaràs, acompañada de los consellers de Treball, Interior, Obres Públiques, Economia, Presidència y Salut, explicó las prioridades del Govern para 2004 en materia de discapacitados y anunció la intención del Ejecutivo de crear una federación deportiva de personas discapacitadas. La vicepresidenta destacó la necesidad de aunar esfuerzos a favor de estos colectivos y explicó que a través de la Conselleria d'Interior i Funció Pública se abrirá próximamente un bolsín de interinos específico para discapacitados.
Estaràs se comprometió a la construcción del centro Joan Crespí durante esta legislatura y resaltó el acuerdo existente entre el Govern y el Ministerio de Trabajo con el objetivo de elaborar un ambicioso plan de residencias. Concluída la reunión de la comisión se celebró un acto institucional en el que participaron más de 200 representantes de asociaciones y entidades relacionadas con los discapacitados de Balears.