P. CANDIA/J.F. MESTRE
La Fiscalía de Balears prevé trasladar en el plazo de uno o dos
años su sede al antiguo edificio que durante 40 años perteneció a
la ONCE en la plaça Bisbe Berenguer, un inmueble de unos 1.700
metros cuadrados y que hasta ahora albergaba la Conselleria de
Benestar Social. El edificio es propiedad del Govern, que lo
adquirió en el año 2000 por un importe de 840.000 euros
(142.700.000 pesetas). El fiscal jefe de Balears, Bartomeu Barceló,
confirmó a Ultima Horaque esa es la opción más viable para que el
Ministerio Público disponga de su propia sede, tras fracasar otras
alternativas, como el Hospital Militar o el inmueble anexo al
antiguo Quarter del Carme, situado en la Rambla de Palma.
El edificio del Govern, construido en 1919, tiene una superficie útil de 1.711,38 metros cuadrados y, tras las obras a las que fue sometido, se ha convertido en un edificio ejemplar en cuanto a eliminación de barreras arquitectónicas. El edificio acoge actualmente las direcciones generales de Cooperación, Juventud, Unidad de Gestión Económica y Personal.
El fiscal jefe explicó a este diario que las actuales instalaciones del Tribunal Superior de Justicia «son insuficientes» para atender las necesidades del Ministerio Público. Los fiscales reclaman desde hace varios años una nueva sede, y el propio fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, ha denunciado las condiciones «penosas» en las que se desenvuelven los fiscales de las Islas.