El célebreSea Cloud, un velero de leyenda de 109 metros de eslora destinado al turismo de lujo, recaló ayer en Palma en el transcurso de un crucero por el Mediterráneo, evocando un romántico pasado oceánico. Construido en 1931 con el nombre de Hussar por los célebres astilleros alemanes Germania, de Krupp, como uno de los mayores yates de vela de la historia, para Marjorie M. Post, esposa del multimillonario Edward F. Hutton, constituye hoy día un museo vivo de la náutica, entre interiores de caoba y cubiertas de teca bajo un intrincado aparejo de bricbarca. Durante la II Guerra Mundial fue reconvertido en buque de observación meteorológica por la US Navy y en 1955 fue adquirido por el dictador dominicano Trujillo, quien lo rebautizó Angelita.
En 1978 sus actuales armadores alemanes lo rehabilitaron para destinarlo a cruceros de aventura con un nostálgico sabor, para apenas 69 pasajeros y 60 tripulantes. Desde entonces, su majestuosa imagen con cuatro palos, 30 velas y acentuadas líneas marineras, ha recuperado todo su esplendor, que alcanza particular énfasis en los suntuosos interiores, que mantienen la decoración original con chimeneas de mármol, dormitorios estilo imperio, grifería esculpida y un comedor que evoca toda la magia del siglo XIX. Un marco de excepción para todos aquellos que buscan el placer de navegar rodeados del «glamour» de antaño, impulsados por el viento.
Gabriel Alomar