La playa de es Dolç y la de es Port, de la Colònia de Sant Jordi, son este fin de semana centro de atención internacional de un torneo de la Copa Pescadisco, campeonato de disco volador. Un deporte considerado en España como un juego y que es muy conocido en países como Italia, Alemania, Holanda y Estados Unidos. Desde hace cuatro años, por estas fechas, cuando la temporada alta, en turismo, ha finalizado, la organización aprovecha la buena temperatura y los bajos precios para reunir gente de otros países y difrutar de partidos sobre la arena de disco volador. «El platillo» conocido popularmente por quienes practican juegos de playa o por algún que otro bañista que ha topado, accidentalmente con dicho instrumento, es sencillo de manejar y con un poco de práctica se puede dominar de manera asombrosa. En Mallorca este deporte-juego es desconocido, de hecho entre los 120 participantes de la Copa Pescadisco no hay ningún mallorquín, aunque sí existen extranjeros residentes en la Isla, la mayoría alemanes que lo conocían, practican y lo están introduciendo poco a poco con eventos como el de este fin de semana.
Hasta la Colònia de Sant Jordi se han desplazado seis españoles,
todos ellos de Madrid, pertenecientes al equipo «Los Quijotes», uno
de los siete que existen en nuestro país; Barcelona, Burgos,
Tenerife, Las Palmas y Girona, son los otros lugares. Estos
muchachos, «Los Quijotes», viven en la capital y practican el
«Ultimate-Frisbee», como oficialmente lo llaman los entendidos,
sobre la hierba, aunque lo ideal es practicarlo en la playa.
Roberto Sánchez es un joven ingeniero que descubrió, hace poco más
de un año, el «frisbee» en Estados Unidos y desde entonces lo
practica y en esta ocasión se ha desplazado a Mallorca para
participar.