La adopción no es sólo para matrimonios que no puede tener hijos. Aquí, en Mallorca, los hay que teniéndolos, deciden adoptar uno, sea chino, de la ex Europa del Este o etíope. Niños y niñas que congenian desde el primer momento con quienes van a ser sus hermanos y padres adoptivos. Es el caso de Nadine y Paula, llegadas no hace mucho tiempo de China y de Addis Abeba. Se llama Nadine y ha sido adoptada recientemente por José Antonio Hazas, piloto de Spanair, y Susana Merodio, que ya tenían dos hijos: Víctor, de 5 años, y Diego, de 3.
Nadine, que llegó a Mallorca con sus padres adoptivos hace dos meses, nació en la ciudad de Nanchan, perteneciente a la provincia de Xianxi. Fue abandonada por sus padres en un mercado, donde alguien la recogió y la llevó al orfanato más próximo. «En China -dice-, las niñas no son queridas, y más en la zona rural, donde la familia suele carecer de medios para mantenerla; por lo tanto, al nacer las abandonan en cualquier lugar aunque procuran que sean sitios donde haya gente que las puedan encontrar. Ella se llamaba Wu Fang, que significa aroma de la mañana, nombre que cuando la hemos inscrito hemos conservado como segundo nombre».
«Antes de tener a nuestros hijos, dice la madre, habíamos pensado adoptar un tercero. Decidimos que fuera chino a raíz de ver en la BBC un reportaje sobre los orfanatos de China. ¿Que cómo se llevan los tres? Aunque ha habido un momento de celos entre ellos, se llevan muy bien», Cuentan que comenzaron los trámites hace dos años a través del Consell. «Y una vez conseguido el certificado de idoneidad, pusimos el asunto en manos de una asociación, a fin de que nos tramitaran los papeles en China. Como ignorábamos que hubiera una en Palma, nos decidimos por la primera que encontramos en Internet, que se llama Piau, y es de Valencia. Por supuesto, nos gustará contactar con la de aquí, cosa que vamos a hacer pronto a través de unos amigos, que también son padres adoptivos.
Pedro Prieto