El inspector jefe de la Fiscalía General del Estado, Rafael Valero, que sustituyó a Juan José Zato el pasado mes de julio, realizó una visita ayer al fiscal jefe de Balears, Bartomeu Barceló, con el objetivo de pasar revista a los problemás más acuciantes del Ministerio Público de las Islas. Valero, que durante muchos años desempeñó el cargo de fiscal jefe de Asturias, pudo conocer «in situ» la precariedad de medios con los que se desenvuelven en Balears la plantilla de 42 fiscales.
Acompañado por Barceló, recorrió las dependencias del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) y los juzgados de Vía Alemania. También, departió con el presidente del TSJB, Angel Reigosa, y la mayoría de magistrados de las Salas de lo Civil y Penal, Social y de los Contencioso Administrativo. Según confirmó a Ultima Hora un portavoz de la Fiscalía General del Estado, la visita de Valero a Palma se enmarca en una primera toma de contacto del nuevo inspector jefe de las distintas fiscalías de cada comunidad autónoma.
En distintas ocasiones, los fiscales de las Islas se han quejado públicamente de la precariedad de medios con los que trabajan, insistiendo en que las actuales dependencias que ocupan se han quedado pequeñas. Dado el volumen de trabajo que generan las Islas, los fiscales consideran que, como mínimo, necesitan una sede propia. Balears es una de las comunidades autónomas en la que más actos delictivos se cometen, especialmente en temporada alta, cuando la población de residentes se multiplica.