La cantante Gisela llegó ayer a tierras mallorquinas, acompañada por su hermano Joan para participar en el certamen de Miss Baleares 2003 que tuvo lugar anoche en la plaza central de Festival Park. La presencia de la «triunfita» en la gala se debe a la neumonía que sufre Naim Thomas, que tenía que cantar en su lugar, y que le impidió ofrecer una de las actuaciones más esperadas. El nombramiento de Gisela como sustituta cogió por sorpresa a muchos, entre quienes cabe destacar a la propia cantante, que reconocía a su llegada a Palma que «me enteré hace un día de que venía a Mallorca». Los miembros de su club de fans en Balears apresuradamente se pusieron manos a la obra para poder ver a su ídolo en carne y hueso. Y allí estuvieron, esperando horas y horas en la terminal, sus deseos e ilusiones pudieron más que el cansancio y al final consiguieron hablar con Gisela, la cual no les defraudó y sin borrar la sonrisa de su rostro no paró de firmar autógrafos, hacerse fotos y dialogar con ellos.
La barcelonesa, en la que es la octava vez que visita la Isla, ya lleva vendidas más de 20.000 copias de su segundo trabajo, titulado «Más allá» y que salió a la venta el pasado día 25 de agosto. Un disco que según dijo es «diferente, mucho más original y que transmite con creces la personalidad de Gisela». Dentro de este nuevo trabajo se puede encontrar la canción «Més enllà», que interpreta en catalán, su segunda lengua. Un hecho que ella misma describe como «un regalo para la gente catalana», la de su tierra. Entre los proyectos que tiene para la siguiente temporada está poner voz a la canción de una telenovela brasileña.
Simó Mateu