El PSM aprovechó ayer la presentación de sus alegaciones al Institut de Serveis Socials i Esportius que ha aprobado de manera inicial el Consell para pedir a PP y UM que den «marcha atrás» a este proyecto. Bárbara Bujosa, consellera del PSM, criticó la «falta de sensibilidad y elegancia» que han mostrado PP y UM al haber creado dicho instituto «sin un debate político previo ni un proceso de participación y consenso con las entidades implicadas. No hay comisión informativa, no hay mesa negociadora y no hay contactos con las organizaciones del ámbito social».
El PSM ha presentado un total de seis alegaciones al proyecto, que se encuentra en fase de exposición pública «en pleno mes de agosto», destacaron Bujosa y Antoni Alorda, portavoz nacioalista en el Consell.
Las alegaciones del PSM inciden en la necesidad de que se mantenga la Conselleria de Bienestar Social para que un responsable dé explicaciones ante el pleno y en las comisiones sobre la gestión del instituto. Alorda señaló la importancia de conservar el «rango» de las políticas sociales, y consideró «inaceptable e impropio de las democracias occidentales que no se garantice el control a un poder ejecutivo».