Mallorca, conocida en todo el mundo por su turismo de sol y playa, cuenta con unas 1.500 personas que viven su día a día al margen de la sociedad, son los marginados o excluídos sociales, popularmente conocidos como 'sin techo', aunque muchos de ellos viven gracias a la ayuda de centros de acogida como Ca l'Ardiaca, Can Gazà, Hospital de Nit, Can Pere Antoni o Sa Placeta.
El fuerte calor de estos días hace que se vean muchos más indigentes por las calles de Palma y de los pueblos de la Part Forana. Aunque no existen censos oficiales, quienes trabajan con los marginados, calculan que, este mes de agosto, unos 600 indigentes están durmiendo en la vía pública, en zonas como la Plaça d'Espanya, los alrededores de la Misericòrdia o en la playa de Can Pere Antoni.
Muchos de estos 'sin techo' están pagando las consecuencias del cierre de Zaqueo y el hecho de que uno de los tres centros de Ca l'Ardiaca esté cerrado, durante estos meses de verano, por reformas. «Hace falta más ayuda para los marginados, para quienes no tienen nada», afirma Jaume Santandreu, fundador de Can Gazà.