La empresa Tirme, propietaria de la incineradora, necesita construir dos nuevos hornos de incineración en la zona de Son Reus para poder eliminar el excedente de residuos urbanos que genera la Isla. La producción de residuos alcanza en estos momentos las 509.000 toneladas al año, pero el volumen un 50 por ciento el año que viene, una vez que esté consolidado el sistema de tratamiento de escombros que ha dado comienzo este año.
Las estimaciones que había realizado el Consell señalan que la puesta en marcha del plan de escombros provocará la aparición de otras 200.000 toneladas de residuos que ahora se vierten en las canteras. Se trata de los materiales de obra que aparecen en los contenedores de escombros, pero que no son reciclables, por lo que su destino último es la planta de Son Reus.
Si a ello se suma el previsible incremento de residuos sólidos urbanos como consecuencia del aumento de población, el Consell estima que, a lo largo de 2004, la producción total de residuos en la Isla puede ser de 750.000 toneladas, un 50 por ciento más que durante el año 2002.