GESA-ENDESA ya ha recibido un centenar de reclamaciones relacionadas exclusivamente con el apagón del pasado lunes. Entre el martes y ayer miércoles, han sido exactamente 98 las reclamaciones que los abonados han hecho llegar a la empresa energética, distribuidas de la siguiente manera: el martes, 43 telefónicas y 14 en persona en la oficina que GESA ha abierto en su sede para atender estas quejas; el miércoles, 33 telefónicas y 8 en persona. En total, 76 teléfonicas y 22 en persona. En estas reclamaciones, por parte de particulares o empresas, se exigen descuentos en las facturas o algún tipo de compensación económica por los perjuicios y molestias que produjo la avería que hizo «caer» todo el sistema eléctrico de Mallorca.
Las denuncias relacionadas directamente con el apagón casi duplican la media de reclamaciones de todo tipo que recibe GESA diariamente, cuantificada en unas 60. La oficina habilitada por GESA está abierta de 8'30 a 13'30, mientras que el teléfono al que pueden llamar los abonados es el 902 500 902. No es ningún número especial, sino el teléfono normal de atención al cliente, pero la empresa ya está diferenciando lo que serían reclamaciones normales (facturas, contadores, suministro, etc.) de las que están vinculadas únicamente al apagón del lunes. Unas cuarenta personas están atendiendo el teléfono para atender reclamaciones. Sólo el día del apagón, fue necesario que 120 personas se pusieran al otro lado del teléfono para ofrecer información y, sobre todo, recibir quejas.
Todo tipo de empresas, comercios y establecimientos públicos se vieron perjudicados en mayor o menor medida por la falta de suministro eléctrico en la tarde del lunes, interrupción que en algunas zonas se prolongó durante más de seis horas. El sector de la restauración fue uno de los que más daños sufrió no sólo por la pérdida de clientes, sino por la inutilización masiva de productos perecederos que deben permanecer en frío. Incluso los bares más modestos no podían servir un simple café o una comida rápida.