Más de una veintena de alumnos de quinto curso del colegio Sagrat Cor de Palma iniciaron ayer, y durante ocho días, unas muy peculiares colonias de verano. Todo el centro escolar simuló y se decoró como el aeropuerto de Son Sant Joan. Los chavales, cargados de maletas y mochilas, recogieron sus billetes de avión y pasaron por toda la «odisea» que sufre cualquier pasajero que coge un avión. Tuvieron que embarcar las maletas, mostrar el pasaporte y recorrer largos pasillos hasta llegar a la puerta D-69, donde el vuelo con «destino» a Venecia de la compañía «Sagrat Cor Airlines» despegaría. Pero antes ocurrió uno de los sucesos que puede que alguno de nuestros lectores haya padecido alguna vez y es que entre las maletas había, de manera simulada, un paquete sospechoso, que fue descubierto por el audaz «Cuc», un perro policía que estuvo pendiente de todo hasta que los chavales subieron al «avión» que en realidad era un autocar. Una vez todos sentados estuvieron atentos a las indicaciones de las azafatas, que realizaron una demostración de cómo comportarse y qué hacer en caso de emergencia, como coger las mascarillas de aire o ponerse el chaleco. Todo un logrado y esmerado trabajo coordinado por el profesor Miquel Fullana, quien, junto con seis monitores más, convivirá con niños y niñas de 10 y 11 años de edad. El objetivo de estas tradicionales colonias es dedicar cada día a un país diferente, estudiar y vivir con ejemplos sus tradiciones, costumbres, gastronomía, curiosidades, etc. Así pues, ayer partieron hacia Venecia, para seguir su andadura cultural por lugares como Río de Janeiro, Tokio, París, Orlando, Hawai e incluso realizar un safari por Àfrica. Pero lo más curioso de todo es que viajarán de una manera interactiva, puesto que no saldrán de la casa de colonias que el Sagrat Cor tiene en el pueblo de Galilea. Por cierto, algunos de estos 'peques' repite experiencia, pero otros, ilusionados, descubrirán estas colonias estivales; entre ellos, Alejandro Ramis, que cumple 11 años hoy miércoles.
J.Aguirre