¿Aviones reactores o turbohélices? El sector aéreo no se pone de acuerdo al valorar la decisión del Govern de instar la utilización de reactores en las rutas interinsulares que serán declaradas de interés general, según confirmó la consellera d'Obres Públiques, Mabel Cabrer. Un piloto se puso en contacto con este diario para criticar las declaraciones de la consellera, insistiendo en que las rutas serán deficitarias si se elige a los aviones reactores.
Añadió que en esas distancias «tan cortas» son preferibles los aviones turbohélices, ya que sólo tardan cuatro minutos más en cubrir, por ejemplo, la distancia entre Palma y Eivissa, y pronostica que el Govern «va a tener que pagar cientos de millones a esas compañías por sus grandes pérdidas al utilizar reactores». Dos expertos del sector, Mario Hidalgo, directivo de AECA y director general de Hola Airlines, y Tomás Cano, ex presidente de Air Europa y Centennial, entre otras compañías, defienden al reactor. «Por su volumen de carga, menor coste de mantenimiento, el reactor es preferible en esas distancias», dijo Hidalgo. Para Cano, «los reactores, tipo Embrair y Canadair, de cien pasajeros, son los más indicados», precisó. Air Nostrum, por su parte, defendió la idoneidad de los turbohélices, aunque sin restar méritos al reactor de cien plazas.