C. AGUSTIN
A pesar del calor reinante, el Castell de Bellver resultó un marco
incomparable en la ceremonia de entrega de diplomas de los cursos
de educación para adultos del curso 2002-2003. En el mismo se
dieron cita cerca de 600 personas, profesores y alumnos que
recibieron su título acreditativo de manos de la alcaldesa de Palma
quien presidió el acto.
En estos cursos se han matriculado 1.713 alumnos, de los cuales una amplia representación se dio cita ayer en Bellver.
La alcaldesa de Palma, acompañada por varios miembros de su recién estrenado equipo, entre ellos el regidor de Educació i Cultura, Rogelio Araujo, la regidora de infraestructuras, Caterina Terrasa y la regidora de Acció Social, Margarita Ferrán, entre otros, repartió los diplomas a los representantes de las diversas escuelas de Ciutat.
Asimismo, la alcaldesa felicitó tanto a los profesores como a los alumnos el gran esfuerzo realizado: «Ciertos actos en los que tiene que participar un alcalde son muy gratificantes, como en este momento en que nos reunimos para reconocer el esfuerzo de todo un año». Cirer alabó «el reto modelo» de los presentes que «son un verdadero ejemplo de superación tanto en el ámbito profesional como humano». La alcaldesa les calificó de «ciudadanos excepcionales».