LL.LORENZO/P.C.
Diversas empresas, una de ellas austríaca, se han interesado por
adquirir el grupo mallorquín de bebidas que explota la marca Miret
y que está formado por Miret Piel de Cristal S.L., Refrescos
Mallorquines S.A. y Bebidas Frescas S.L. Así lo confirmó ayer el
hasta ahora presidente de la empresa y actual liquidador, Julià
Puig. El empresario aseguró que, sin embargo, hasta ahora las
negociaciones «se han mantenido desde el anonimato» por parte de
los interesados y que desconoce quién hay detrás de la mayoría de
ofertas, que, eso sí, son más de dos.
Hace dos semanas que la dirección del grupo empresarial solicitó la declaración de quiebra ante la incapacidad de poder hacer frente a más de 4 millones de euros de endeudamiento. El juez aceptó la petición el miércoles y hoy entra en vigor. Por otra parte, la dirección del grupo empresarial y sus trabajadores, muchos representados por la Unión Sindical de Trabajadores (USO), firmaron ayer el acuerdo de regulación de los puestos de trabajo después de intensas negociaciones. El acuerdo prevé una indemnización de 30 días por año trabajado a cada empleado. Según el secretario general de USO, Rafa Pons, «este acuerdo es el que la mayoría de trabajadores ha querido».
A pesar del acuerdo, Pons trasladó ayer al nuevo conseller de Treball, Guillermo de Olives, su preocupación por el futuro de la empresa y le pidió la implicación del Govern. USO defiende que en el caso de que hubiera una empresa compradora, debería asumir el levantamiento de la quiebra, así como los gastos pendientes. Pons considera que es «importante» apoyar los productos mallorquines y dar una salida de sus productos al sector hotelero.