La tercera jornada de la VII Universitat d'Estiu d'Estudis de Gènere abordó ayer la situación de la mujer en el mercado laboral. Carmen Sarasúa, profesora de Historia Económica de la Universitat Autònoma de Barcelona, y Lina Gálvez, profesora de Historia Económica de la Universidad Carlos II de Madrid, impartieron el taller «Privilegis o eficiència? Dones i homes en els mercats de treball». Sarasúa reconoció que «aún hoy, en España una mujer cobra a igual trabajo el 70% del sueldo que percibe un hombre». Reconoció que es preciso seguir avanzando en la igualdad, aplicando medidas como las que favorezcan la conciliación de la vida familiar y laboral, si bien, advirtió, «las medidas que se adoptan pueden mantener estereotipos o romperlos».
Así, por ejemplo, afirmó que «el trabajo a tiempo parcial es una trampa peligrosísima para las mujeres», puesto que consolida el hecho de que sigan encargándose de los trabajos domésticos pero sin asegurarse un futuro estable. Tanto Sarasúa como Gálvez coincidieron en que los contratos a tiempo parcial constituyen la respuesta que la Administración propone para conciliar el trabajo doméstico con el empleo en las mujeres, aunque en su opinión «la solución real es el reparto en el uso del tiempo -que se dedica a tareas domésticas, a los niños o al cuidado de los mayores- entre hombres y mujeres». Estas tareas siguen siendo competencia de las mujeres y, advirtieron, «las repercusiones sobre la salud y el nivel de estrés están aumentando de forma considerable».