Guillermo Perry, economista jefe del Banco Mundial para América Latina y Caribe, pronosticó ayer un repunte de la inversión turística española y balear en la región, tras la paralización provocada por los atentados terroristas del 11 de septiembre. «La suspensión de inversiones fue temporal, los flujos turísticos registran valores similares a los anteriores al 11-S y las inversiones no se demorarán», afirmó Perry, quien ayer pronunció una conferencia titulada «América Latina: ¿Hacia un nuevo boom y una nueva madurez?, invitado por la Fundació Càtedra Iberoamericana de la Universitat de les Illes Balears, UIB.
Perry sostuvo que la crisis de las economías iberoamericanas, con crecimientos nulos en 2001 y negativos en 2002, respondió a factores externos e internos. Entre los primeros destacó que, por primera vez en los últimos veinte años, las tres primeras economías del mundo estaban en «recesión virtual», lo que repercutió en las economías de América Latina y resto del tercer mundo debido a la integración comercial mundial. «La primera razón de la crisis fue la caída de las exportaciones y de los precios de los productos básicos a partir de 1998», factores a los que se añadieron el encarecimiento del petróleo, como consecuencia de la guerra de Irak, y la caída de las inversores exteriores.