Un numeroso grupo de vecinos de la zona de Gènova se opone a la construcción de un nuevo restaurante y del consiguiente aparcamiento para clientes en el Camí del Tramvia, número 37. Según confirmaron fuentes de la Gerència d'Urbanisme de Cort, la constructora tiene concedida la pertinente licencia de obras, desde el 13 de enero de 2003, pero aún no la de actividad, que tiene solicitada. Dichos residentes afectados tienen previsto entregar, en principio durante la próxima semana, más de trescientas firmas en el Registre de Cort contra la posibilidad de que finalmente se realice el citado establecimiento en la zona.
Los prolegómenos se sitúan en el 29 de abril de 2002, fecha en que el Servei de Llicències d'Obres de la Gerència d'Urbanisme dio cuenta de que había recibido la solicitud de licencia de obras por parte de la promotora del restaurante, afirmando que no veía obstáculos para su concesión, si bien le recordaba las condiciones añadidas que tenía que cumplir para poder entrar en funcionamiento. Los vecinos que se oponen a dicho local mantuvieron diversas reuniones con responsables de Cort, manifestándoles los problemas añadidos de molestias ambientales, ruidos y tráfico que ocasionaría el nuevo negocio, hasta que finalmente presentaron, el 17 de marzo de este año, un recurso de alzada contra este proyecto, alegando que la Ley establece que «no podrá concederse la licencia de obras sin que se haya otorgado previamente la licencia de instalación».
A propósito de este recurso, las citadas fuentes de Urbanisme indicaron que si la promotora tiene la licencia de obras y un informe de uso favorable -paso previo a la concesión de la licencia de actividades- puede seguir con los trabajos, si bien podría suceder que una vez acabadas las obras no se autorizase la puesta en marcha de este restaurante si Cort considerase que se ha incumplido alguno de los puntos del proyecto presentado. En un caso así, la empresa constructora no tendría derecho a reclamar indemnizaciones al Ajuntament.
En cualquier caso, cabe señalar que los trabajos previos de excavación en el solar se encuentran parados desde hace dos meses, quizás a la espera de que Cort conceda finalmente la licencia de actividad. Por último, los vecinos destacaron que el local se situaría en las inmediaciones de un Àrea Natural d'Especial Interès (ANEI), en concreto de la de Son Berga, y añadieron que en la zona ya hay una gran saturación de vehículos y de establecimientos.