El Consell de Mallorca celebró ayer el último pleno de la legislatura con un nuevo acuerdo urbanístico entre el PP y UM, en esta ocasión para dar el visto bueno al proyecto de fachada marítima presentada por el Ajuntament de Palma. PSM y EU-EV se abstuvieron, mientras que el PSOE votó en contra de esta propuesta. El conseller d'Urbanisme del Consell, Antoni Pascual aseguró que se trata de un proyecto bueno para Palma que ha sido bastante consensuado por los grupos políticos. Pascual agradeció la abstención en positivo del PSM ya que señaló que los nacionalistas están de acuerdo con el 90 por ciento del proyecto.
El portavoz del PP en el Consell, Jaume Font, también coincidió con Pascual en que salen beneficiados los ciudadanos de Palma. Por su parte, Antoni Alorda, en representación del PSM, explicó que su partido considera que se trata de una mejora, pero presenta aspectos negativos como el hecho de que no se mejore la relación de la ciudad con el mar.
Para el representante del PSOE Pere Massuttí, más que un proyecto de fachada marítima el Ajuntament ha presentado una simple reordenación de volúmenes. «Se pierde la ocasión de abrir una ventana al mar», dijo Masuttí. La propuesta aprobada ayer no incluye todavía el soterramiento de la autopista, que queda aplazado una segunda fase.