M.G./J.M./J.M.A.
Antoni Roig, cabeza de lista del PSOE al Ajuntament de Palma, no
podrá volver a presentarse como candidato a la Alcaldía de Ciutat.
Así lo establece el código ético del Partido Socialista, que
determina que un mismo aspirante no puede encabezar en más de dos
ocasiones la lista del partido a unos mismos comicios si no gana en
ninguna de las oportunidades.
Y es el caso de Roig, que ha sido el cabeza de cartel de los socialistas en las elecciones municipales del año 1999 y en las que se acaban de celebrar. El edil socialista declinó ayer realizar nuevas declaraciones y pasó la mañana en su despacho de la Casa Consistorial analizando los resultados obtenidos el pasado domingo. El segundo protagonista del «día después», el candidato a la Alcaldía de UM, Ferran Trujillo, no escondió ayer su «desilusión» por los resultados contrarios obtenidos el domingo, que suponen la desaparición de esta formación del mapa político del Ajuntament de Palma, tan sólo cuatro años después de recuperar la presencia en Cort.
Según declaró, «creemos haber realizado un buen trabajo durante estos últimos cuatro años, serio, coherente y de oposición constructiva», pero, en su opinión, la clave de estos comicios ha estado en que «los ciudadanos han votado en clave de elecciones generales, se ha desfigurado la campaña y se ha hablado de temas que nada tienen que ver con el día a día de la ciudad».