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Los touroperadores exigen a los hoteleros que no suban precios para el verano 2004

La presión de los grupos turísticos provoca que los empresarios estén aceptando condiciones draconianas

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Los hoteleros de las Islas, especialmente los de Mallorca, que han iniciado la contratación del próximo verano, se están viendo obligados a aceptar las condiciones draconianas de los grupos turísticos, con incrementos de precios cero y, en algunos casos, reducción de cupos de camas. Los touroperadores británicos han sido los primeros en iniciar las negociaciones con las pequeñas, medianas y grandes cadenas hoteleras, circunstancia que ha puesto de manifiesto la estrategia que van a adoptar los grupos turísticos de cara a la contratación de la próxima temporada turística.

«Están contratando el verano 2004 totalmente a la baja, sin aumentos de precios y presionando al máximo a la hora de acordar los cupos de contratación de camas. A diferencia de otros años, la prepotencia de los touroperadores está superando todo lo previsto, puesto que llegan a pedir en determinados hoteles hasta bajada de precios, lo cual es inasumible. Si los touroperadores británicos están en esta situación, los alemanes, después de la caída de ventas, turistas y rentabilidad, presionarán aún más», señalan desde las patronales hoteleras de Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera.

El presidente de la Asociación de Cadenas Hoteleras de Baleares, Miquel Amengual, apunta que la actitud de los grupos turísticos británicos, «nos hará perder competitividad, puesto que al no haber aumentos de precios no se podrán cubrir los costes derivados del IPC de este año, lo cual tendrá que ser asumido por las empresas, afectando ello a su cuenta de resultados y las inversiones previstas». Amengual añade que al darse la circunstancia que los grupos turísticos alemanes controlan el mercado vacacional europeo, «saben perfectamente cómo tienen que negociar de cara al verano 2004, porque tienen encima de la mesa los estados de ventas de este verano tanto en lo que respecta al mercado alemán como británico, de ahí que pueden exigir e imponer sus condiciones. Lo único positivo es que la libra se mantenga en los actuales niveles de cotización, porque en caso contrario la situación puede empeorar aún más a corto y medio plazo».

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