En opinión de los entendidos, el baile flamenco, además de expresión corporal, es un excelente ejercicio que mantiene en muy buena forma a quien lo ejecuta. Además, los años no cuentan. Se puede bailar a cualquier edad. Como en todo, para iniciarse la mejor es la más temprana, pero siempre se está a tiempo. ¿Y son las sevillanas la mejor puerta para entrar en el mundo del flamenco? Diana Tortella Martín, profesora de flamenco del Mega Sport, una bailarina que ha estado bailando durante cuatro años con «Luces de Bohemia» y que sigue estudiando de la mano de Carmeta, pero que está en condiciones de enseñar, considera que sí.
Sus alumnas, en su mayoría, van ataviadas al uso, bata larga, bata de cola, lo que ayuda a meterse más y mejor en el trabajo que están haciendo: Bailar. Y ahora es tiempo de bailar, es tiempo de Feria de Abril. El viernes 9, el estreno.
-Observamos que en la clase sólo hay señoras, ¿por qué?
¿Es solo clase para ellas?
-No, es una clase mixta,
pasa que al hombre le da vergüenza meterse en una clase en la que
la mayoría son mujeres. Los más vienen a unas pocas clases y luego
ya no los vemos. En cambio, entre las mujeres el flamenco tiene una
grandísima aceptación, como puede ver.
-Dice usted que las sevillanas son la mejor forma de
entrar en el mundo del flamenco.
-Sí, por varias razones, pero sobre todo por lo populares que
son.
-¿Se sigue iniciando en las sevillanas apoyándose en
aquello de que tienes que levantar el brazo como si cogieras una
manzana, aproximarlo a la cara como si te la comieras y por último
bajarlo en claro ademán de tirarla, o bien eso ha pasado a mejor
vida?
-Eso, que funcionó en su día, ya está completamente obsoleto.
Empiezas aprendiendo a colocar el cuerpo, los brazos y las piernas
y sobre todo a saber mover las manos. Luego aprendes a coordinar
los movimientos, y poco a poco te vas soltando. Si le pones ganas,
y te gusta, te das cuenta que es un baile fácil.
-¿La Feria de Abril hace que la gente aprenda a bailar
sevillanas
-Por supueto que la feria nos motiva muchísimo, entre otras cosas
porque en Palma apenas hay salas en las que se bailen sevillanas.
En la Feria de Abril pones en práctica lo que has estado estudiando
y aprendiendo a lo largo del año.
-O sea, que el hecho de que estemos en Feria de Abril no
hace que la gente se apunte a las clases más que en otras épocas
del año, ¿no?
-No, en todo caso la gente está más animada. Da la sensación de
como si quisieran hacen un repaso general de todo para ir a la
feria en las mejores condiciones.
-¿Y el flamenco, es también fácil?
-Eso es otra historia. No es fácil, requiere mucho estudio y
preparación, cosa que vas adquiriendo a base de trabajar mucho. Los
vas iniciando enseñándoles a zapatear un poquito, a hacer compás,
pero sin prisas a fin de que no se desanimen y se te echen atrás. Y
más si, como aquí, no estamos en una academia de baile sino que
esto es un gimnasio. Yo procuro animarles; si veo que no lo
entienden, insisto y les hago ver que no es fácil, pero que lo
pueden conseguir a base de repetir. Y así, poco poco los voy
metiendo en el ritmo de los demás.
-¿Se hace mucho ejercicio con el
flamenco?
-Muchísmo. ¿Sabes? Trabaja todo el cuerpo, te pone en una forma
excelente. Aparte, es una forma de vida, una filosofía, una
terapia. Al menos eso es para mí. Sin el baile yo me muero, y eso
se lo intento transmitir a mis alumnas.
Pedro Prieto