Los vecinos del Vivero cuentan, desde ayer en que fue inaugurada, con una mini residencia para enfermos mentales. El equipamiento residencial, que depende del área de salud mental de la empresa pública Gestió Sanitaria de Mallorca (Gesma), cuenta con ocho pisos. La consellera de Salut i Consum, Aina Salom, acompañada del conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas; el gerente de Gesma, Josep Carbonero y el director general d'Habitatge, Jaume Carbonero, además de una amplia representación de profesionales de la sanidad, fue la encargada de inaugurar las nuevas instalaciones de salud mental en el Vivero.
Salom destacó, en su intervención, la importancia de este tipo de centros para «mejorar la calidad de vida de los enfermos mentales» con la intención de permitir a los usuarios de la mini residencia una vida autónoma y plena. La mini residencia, ubicada en el número 70 de la calle Crèdit Balear, cuenta con un total de 14 habitaciones, de las que siete son dobles y seis individuales. También dispone de tres salas de estar; una sala polivalente; una sala taller y un comedor comunitario.
En total se dispondrá de 20 plazas que se organizarán y distribuirá de una forma flexible que permita dotar las diferentes necesidades residenciales de la población con enfermedad mental grave y de larga evolución, con esta finalidad se han establecido tres tipos de estancias: corta estancia, con un 10 por ciento de las plazas ofertadas; media, con un 30 por ciento y larga con un 60 por ciento de las plazas ofertadas. La plantilla de la mini residencia estará formada por un psicólogo; 16 monitores -que realizarán su trabajo por turnos rotatorios-; un auxiliar de limpieza y personal de apoyo, terapeutas ocasionales, trabajador social y administrativos.