El Govern balear mantendrá parte de las competencias en materia de acción social después de que se realice el traspaso al Consell, previsto para el 30 de junio próximo. La consellera de Benestar Social del Govern, Fernanda Caro, y su homóloga en el Consell, Josefina Sintes, cerraron prácticamente el acuerdo de transferencia en una reunión mantenida el pasado miércoles, a pesar de que aún quedan algunos flecos pendientes de negociación.
El acuerdo fija que será el Govern quien pague las nóminas de los trabajadores durante todo el año dadas las dificultades que comportaría realizar el cambio de nóminas a mitad de año. Sin embargo, el Govern quiere que sea el Consell quien gestione la política de personal de los nuevos trabajadores.
Desde que se aprobó la ley hasta que el Consell reciba realmente la transferencia habrá pasado un año y medio, periodo durante el cual el Govern ha puesto en marcha una serie de programas específicos propios que no se transferirán, como es la tarjeta básica o el pago de las pensiones no contributivas. El Consell sí asumirá la gestión de todas las residencias de la tercera edad, incluida la Bonanova.