El espectáculo de la imagen de corcho a trozos (XVI - XVII), ya no resulta tan doloroso como el día de autos, cuando la venerada imagen yacía en el suelo de la iglesia hecha añicos. Antonia Reig, directora del taller, y Pere Joan Llabrés, delegado diocesano de Patrimonio, explicaron los pormenores de la restauración. Los pies, piernas, brazos, torso y cabeza ya han tomado forma una vez que los trozos de mayor tamaño han sido 'pegados'. Lo difícil fue recomponer el puzzle clasificando los restos por tamaño y color.
A través de las roturas se ve perfectamente cómo la imagen fue hecha mediante láminas de corcho superpuestas. El examen que se le practicó en la Clínica Rotger dejó al descubierto intervenciones de que había sido objeto a lo largo de los siglos, así como el dato de que uno de sus brazos no es del corcho original, sino de madera, resultado también de otra actuación. Clavos y grapas de hierro, y pletinas de aluminio 'sujetaban' la imagen desde el interior, materiales que serán sustituidos por otros más modernos, resina y varillas o espigas de fibra de vidrio que no se oxidan. El radiólogo Pedro de Miguel y los técnicos Joan Beltrán y Jesús Navarro escudriñaron el interior del Sant Crist con las técnicas más modernas. Antoni Reig explicó que «el resultado fue una sorpresa al encontrar el brazo derecho totalmente de madera, por tanto posterior a la obra, y el brazo izquierdo y las piernas literalmente cosidos con pletinas de aluminio, pernos, clavos, grapas de hierro, y la cabeza con dos pletinas y pernos de hierro». Tras retirarlos, «los vacíos dejados por los mismos se han rellenado con resina, que no aporta peso, hecho que se ha tenido muy en cuenta por tratarse de una imagen procesional». De momento se han consolidado los pies, brazos, manos y parte de una pierna.
Sobre el origen de esta imagen existen muy pocos datos y tampoco están documentadas las intervenciones de las que fue objeto anteriormente, excepto una que se hizo hace dos años en el propio Taller Diocesano para 'reparar' la policromía de las piernas «muy desgastada por el contacto directo de los fieles». Una vez reforzada toda la estructura interna mediante las espigas de fibra de vidrio, y el Crist ya en una sola pieza, se pasará a la fase de «reintegración pictórica de las faltas de policromía con técnica ilusionista».