IVAN TERRASA-MADRID
«Ha sido una reunión positiva y provechosa». Estas fueron las
primeras palabras del conseller d'Obres Publiques, Habitatge i
Transport, Francesc Quetglas, a la salida de la primera reunión del
equipo de trabajo que estudia la declaración de servicio público
para los vuelos de Balears, celebrada ayer en el Ministerio de
Fomento, en Madrid.
«Quede claro que esto no es una mesa de negociación ni nada parecido. De momento hemos empezado a contrastar nuestras cifras con las de Aviación Civil. La voluntad es seguir avanzando por el mismo camino y alcanzar un punto en común», dijo el conseller, tras dos horas y media de reunión. Este equipo de trabajo, constituido el pasado día 20, lo conforman, por parte del Govern, el propio Quetglas; la presidenta del Consell Insular de Menorca, Joana Barceló; el conseller insular de Transports del Consell Insular de Eivissa i Formentera, Santi Ferrer; y el secretario general técnico d'Hisenda i Pressuposts, Lluís Llinàs. La representación del Gobierno central está encabezada por el director general de Aviación Civil, Ignacio Estaún.
«Ambas partes han mostrado talante de alcanzar un acuerdo», confirmaba Joana Barceló. «No se trata de un tira y afloja, hay mucho trabajo por delante y mucha documentación a cotejar por ambas partes». Santi Ferrer, por su parte, consideraba que «sería un error obcecarse en alcanzar un acuerdo antes de las elecciones del 25 de mayo, aun cuando es evidente que el Govern es el primer interesado en que así sea». Ferrer, quien recalcó el «magnífico talante» mostrado por ambas partes en la reunión, se quejó sin embargo de que «el Gobierno del Estado haya esperado tanto en querer abordar este tema, y ahora nos pida que lleguemos a un acuerdo a toda prisa».