Protesta simbólica ante el Consulado de los Estados Unidos. Los manifestantes portaban velas como representación de los muertos que puede ocasionar la declaración de guerra contra el pueblo iraquí. Entre quienes se dieron cita ante el consulado se encontraba Eberhard Grosske, candidato a Cort por Esquerra Unida, «para dar un paso más entre un millón de pasos, un día tras otro. Pasos desarmados y pacíficos que tienen la fuerza de haber quebrado el gobierno de Toni Blair», afirmó.
También se encontraban Miquel Rosselló, conseller de Treball; Lurdes Martín, coordinadora del área de la mujer de EU; Rosa Salleras, miembro de la organización Escudos Humanos; y Pep Suárez, presidente de la Asociación Tasa Tobin para Ayuda a los Ciudadadnos, Attac, entre otros. Pep Juárez, secretario general de la Central General de Trabajadores, leyó el manifiesto final donde hizo una alusión clara al presidente Aznar «por desoír a la opinión pública». Al tiempo que hizo una llamada a los «dirigentes y simpatizantes del Partido Popular, que sean personas de paz, para que de forma pública expresen su discrepacia con Aznar». También se refirió a la manifestación de hoy «como la última oportunidad para detener la locura de la guerra».