Seis viejas ambulancias aparcadas anteayer por la tarde en la calle Miguel Fleta, en la barriada de Son Oliva, suscitaron durante toda la jornada de ayer la queja de varios vecinos de la zona, al creer que habían sido abandonadas. Dichos vecinos incluso llegaron a ponerse en contacto con la Policía Local para denunciar la situación.
Hechas las averiguaciones oportunas, se comprobó que estas seis ambulancias serán retiradas hoy o mañana por los receptores de dichos vehículos, la organización no gubernamental Bombers sense Fronteres. Su portavoz, Andreu Munar, indicó que serán ubicadas en un solar propio para, a continuación, repararlas y acondicionarlas. Tras estos trabajos, serán enviadas a diversos países de Hispanoamérica para que puedan ser utilizadas por distintos hospitales. La primera será enviada a Colombia.
Los vehículos han sido donados a Bombers sense Fronteres por Ambulancias Insulares. En 2001 esta empresa ya donó a la organización no gubernamental dos ambulancias, que en la actualidad están funcionando en Nicaragua. El enfado de los vecinos estaba provocado en parte porque afirman que en los últimos meses se están dejando en la zona numerosos coches abandonados y también porque denuncian que hay empresas especializadas en la venta de vehículos de segunda mano que de forma ilegal sitúan sus vehículos en la calle con un número de teléfono al que han de llamar los posibles compradores.