El turismo residencial en las Islas (segundas residencias y casas particulares) registró el pasado año un alza espectacular en cuanto al número de estancias, puesto que contabilizó un incremento de 2,7 millones de estancias respecto a 2001. Por el contrario, las estancias en hoteles, apartamentos turísticos y viviendas vacacionales bajaron 9,2 millones.
En el gráfico adjunto se aprecia la evolución habida en los dos últimos años, apreciándose en su conjunto la tendencia a la baja de las estancias turísticas, fruto en parte por la caída del mercado emisor alemán, y la recesión turística que afectó a lo largo de todo el pasado a Mallorca, Menorca, Eivissa y Formentera.
El salto cualitativo se da en el número de estancias registradas en casas particulares, con un alza que alcanza casi el 25 por ciento respecto al acumulado enero-diciembre de 2001, puesto aumentó en 2,5 millones de estancias (11.853.750 estancias frente a los 9.297.402 de 2001).El análisis de estos datos refleja el progresivo aumento del denominado turismo residencial en las Islas, en concreto en Mallorca, propiciado por el creciente aumento de la población extranjera, principalmente alemana y británica, con viviendas en propiedad o alquiladas, así como por el hecho de que cada vez hay más turistas individuales que se reservan el alojamiento al conocer bien las Islas.
La disminución de las estancias turísticas tiene un efecto directo en la recaudación del impuesto sobre pernoctaciones en alojamientos turísticos (la ecotasa), mientras que las estancias residenciales, que no están gravadas con este impuesto, están incrementándose considerablemente en los últimos años.