El Consell de Mallorca, con la intención de adaptar las infraestructuras e instalaciones de la residencia de la Llar dels Ancians de Palma a la normativa vigente, ha llevado a cabo una amplia reforma global del centro. La presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, acompañada de la consellera de Salut i Consum del Govern, Aina Salom; la consellera de Serveis Socials del Consell, Josefina Sintes, y el director de la residencia, Pere Fullana, inauguró ayer la nueva oficina de farmacia y la tercera planta del edificio B para asistidos de la Llar d'Ancians del Consell. La nueva oficina de farmacia, ubicada en la planta baja de la Llar d'Ancians, será gestionada por el Consell de Mallorca, mientras que el IB-Salut se ha hecho cargo de contratar al farmacéutico responsable de su funcionamiento. Tal y como indicó la presidenta del Consell, Maria Antònia Munar, «esta farmacia se ha podido construir gracias al impulso del Govern, desde que éste asumiera el traspaso de las competencias de sanidad» y matizó que «hace años que pedíamos poder instalar una farmacia» en la Llar d'Ancians y recordó que el poder contar con este nuevo servicio supondrá «reducir el gasto en productos farmacéuticos», ya que se consumirán genéricos y se podrá controlar mejor su distribución.
La tercera planta de la Llar d'Ancians destinada a enfermos asistidos consta de nueve habitaciones dobles con baños geriátricos en cada una de las habitaciones, una sala de estar, comedor, office destinado a la atención de los residentes por parte de los profesionales, además de las instalaciones de lencería, limpieza y baño, con un coste total de inversión de 200.000 euros en reforma y adaptación de las instalaciones.