Llega el Carnaval y con él las típicas Rues. La de Marratxí, que
tuvo lugar ayer, congregó a más de 600 personas entre comparsas,
carrozas y disfraces individuales que con sus trajes pusieron color
a las calles del municipio.
Poco después de las 16.30 horas empezó el desfile, media hora más
tarde de lo previsto, y con algunos problemas de desplazamiento por
parte de algunos de los participantes, que tenían dificultades para
subir las pronunciadas cuestas. Entre los participantes de la rua,
una de las primeras de la Isla, pudieron verse adhesivos y
pancartas contra la guerra de Irak. Este año la Rua de Marratxí se
caracterizó por la diversidad de los disfraces, que trataron temas
muy diferentes, desde el Taller de Costura, que representaba
ovillos de hilo y abrieron el desfile, hasta las Serpentinas
bailadoras, el Carnaval de Venecia, galletas Maria, bocas
gigantescas o grandes fregonas.
Una de las carrozas que despertó más la atención de los espectadores y arrancó aplausos en su paso fue Máis que nunca, que iba seguida de la comparsa La fuerza de la vida y que hacía referencia a la catástrofe del «Prestige».
EL Ayuntamiento decidió otorgar siete premios, que se
repartieron de la siguiente manera. El primer premio de 375 euros
fue por las Serpentinas bailadoras, mientras que el segundo, con
354, fue para la comparsa de aviadores ciclistas Pedales air lines.
Los 315 euros del tercer premio serían para eCarnavale di Venezia y
el 285 del cuarto fueron a parar a la carroza Mais que nunca. Los
tres premios restantes de 255, 225 y 195 euros serían para las
comparsas Para una buena sonrisa, Taller de costura y Reutilización
y diversión para un mundo mejor construido a base de recortes de
«Diari de Balears» y «Ultima Hora». El jurado concedió menciones a
nueve de los participantes en solitario y una especial a la Banda
Municipal de Marratxí.
I.Pericás
Fotos: S.Amengual