El edil d'Educació i Joventut de Cort, Jordi Llabrés, quiere que los colegios públicos de educación infantil y primaria de Palma cuenten con bedeles, ya en el curso 2003/2004, para que se ocupen de la vigilancia. En los centros de educación secundaria sí hay bedeles, que acceden a su plaza por oposición.
Llabrés mantuvo días atrás una reunión con varios directores de colegios públicos de Palma y todos ellos mostraron su posición favorable al proyecto municipal. El edil envió el pasado miércoles un escrito al conseller de Educació i Cultura, Damià Pons, solicitándole mantener un encuentro para tratar sobre la propuesta de Cort.
«Podríamos hablar de la determinación de funciones de los bedeles, de su dependencia administrativa, del tipo de contrato, del presupuesto y de quién lo pagará», indicó. Los acuerdos podrían incluirse en el convenio marco firmado entre ambas instituciones en octubre de 2001. Llabrés señaló que las funciones de los bedeles serían, entre otras, apoyar a la dirección, controlar las entradas y salidas, hacer fotocopias, atender las llamadas telefónicas o recoger instancias.