JUAN MESTRE/ELENA BALLESTEROS
Miquel Ramis es el principal aspirante para sustituir a Catalina
Cirer en la Delegación del Gobierno. A falta de que el Consejo de
Ministros tome en los próximos días una decisión al respecto, Ramis
es el dirigente del PP mejor situado para sustituir a Catalina
Cirer y desde las filas populares daban por hecho que será el
elegido por Matas para ser el nuevo delegado del Gobierno.
Miquel Ramis fue alcalde de Alcúdia la pasada legislatura y conseller de Medi Ambient durante el mandato de Jaume Matas. En la actualidad estaba volcado en su profesión de abogado y colaboraba con los negocios hoteleros de su familia. Ramis es una persona de la máxima confianza de Matas. Y es el ministro de Medio Ambiente y presidente del PP balear el que tiene la última decisión sobre el sustituto de Catalina Cirer.
Sólo falta saber cuándo se producirá el nombramiento de Ramis. Catalina Cirer ya expresó hace unas semanas que su intención era dimitir como delegada del Gobierno a finales de enero para poder volcarse en la precampaña para intentar ser alcaldesa de Palma. En declaraciones a este periódico, Ramis no quiso anoche ni confirmar ni desmentir su más que probable nombramiento como delegado del Gobierno. Horas antes, Ramis había jugado al escondite con sus propios compañeros de partido, a quienes negó que él fuera el elegido por Matas para sustituir a Catalina Cirer. Sólo eran rumores, según Ramis.
Desde la cúpula del PP ratificaron anoche que Ramis es el principal aspirante para ser el nuevo delegado del Gobierno. «No hay más candidatos», reconocieron. Se da la circunstancia de que el ex conseller de Medi Ambient se encontraba ayer en Madrid por «motivos profesionales», según admitió el propio Ramis. «Lo que tenga que ser, será», declaró el dirigente del PP a este periódico cuando se le insistió por su posible nombramiento como delegado del Gobierno.