Al menos en la parte que he podido comprobar (yo he estado en O Grove, y el primer día, cuando la marea todavía no había dado señales de vida, en Muxía), el trabajo realizado por los voluntarios del Govern en el litoral gallego ha sido duro. Y lo ha sido incluso cuando no operaban en la playa cazando a mano, o con mallas, las galletas, o con palas la masa grasiente y negruzca, o limpiando la arena o rascando rocas, sino destinados a otras labores.
Como aquel día en que Enrique Peralta se pasó prácticamente toda la jornada en la central de Protección Civil coordinando llamadas o enviando gente a determinados puntos del litoral, o bien anteayer, cuando estuvo en el puerto en labores de coordinación de barcos que entraban cargados con chapapote. «Lo que más me ha impresionado es ver, por un lado, el modo tan duro como trabaja la gente, y por otro comprobar que el esfuerzo que haces es casi en vano, pues quitas porquería y en seguida el mar te manda otra en número superior a la que has retirado».
Manolo Sánchez es de la junta de Protección Civil de Calviá y policía de Capdepera. «Para poder venir aquí he tenido que doblar los turnos, y cuando llegue a Mallorca tendré que ponerme a trabajar de nuevo para recuperar. Pero yo quería venir como fuera. Es más, si esto no se arregla miraré de volver más adelante».Sánchez permaneció todos los días en O Grove excepto uno «en que
quise ver cómo iban las cosas por Muxía», donde le pareció que
había mayor coordinación en cuanto al voluntariado, «porque, según
me han comentado otros voluntarios, algunos listillos de otras
zonas -los menos, afortunadamente- llegan, se apuntan, piden un
equipo de ropa y calzado, se ponen el mono blanco, se hacen unas
fotos y se van de paseo, a hacer turismo hasta la hora de comer;
por la tarde hacen lo mismo no apareciendo hasta la cena. Y como
son voluntarios, duermen también gratis en los pabellones o en los
hoteles que se ofrecen. Ya digo, son unos pocos, pero los hay. ¡Qué
cara! Si esto estuviera mas coordinado, como ocurre en O Grove, al
menos en donde estamos nosotros, o en Muxía... ¡qué se yo!, que se
pasara lista a los equipos, esos listillos no tendrían
cabida».
P.P.