La nueva unidad motorizada de Tránsito de la Policía Local de Palma ha impuesto un total de 2.485 sanciones en su primer mes de funcionamiento, informó ayer el área de Gobernación y Seguridad Ciudadana. El Ajuntament de Palma aseguró ayer que este departamento recién creado «ha cubierto ampliamente» las expectativas que generó la creación de esta unidad específicamente destinada a reforzar la vigilancia en los tramos circulatorios más problemáticos del municipio.
De las 2.485 sanciones, 918 se refieren a infracciones por estacionar en doble fila u otros aparcamientos irregulares, 791 por infracciones en calles catalogadas como Vías de Atención Preferente (VAP), 215 por no emplear el casco de protección en la conducción de motocicletas o ciclomotores y otras 187 por no presentar la documentación acreditativa.
Un total de 102 multas han sido impuestas por ocupación indebida de zonas destinadas a carga y descarga, 59 por utilizar el teléfono móvil durante la conducción, 58 por no respetar los semáforos, 14 por no llevar cinturón de seguridad y 241 se refieren a otro tipo de infracciones. Como consecuencia de la imposición de estas sanciones, la Unidad de Tránsito de la Policía Local ha llevado a cabo la retirada de la vía pública de un total de 115 vehículos.
La nueva unidad cuenta con 45 efectivos pertenecientes a la plantilla de la Policía Local, que desarrollan su labor únicamente en cometidos relacionados con el tránsito en calles y vías públicas urbanas de Palma. Pero, además de la incorporación de estos agentes, la creación de la unidad ha requerido la habilitación de una costosa inversión económica destinada a la adquisición de una flota de veinte motocicletas, dotadas de características mecánicas y aerodinámicas que les confiere la capacidad adecuada para el ejercicio de la vigilancia del tráfico rodado.