El vicepresidente del Govern y conseller d'Economia, Comerç i Indústria, Pere Sampol, presidió ayer la Diada dels Economistas 2002, en un acto que tuvo lugar en el centro Sa Nostra de Son Fuster y en el que se homenajeó a los colegiados con más de 35 años de antigüedad. Sampol, que hizo un análisis sobre la coyuntura económica local e internacional, afirmó que «somos la economía más internacionalizada de toda Europa y muy sensible, en consecuencia, a los cambios que se puedan producir, tal y como está sucediendo en Alemania o lo ocurrido tras el 11-S».
Destacó la actitud de las empresas de las Islas que han apostado por salir al exterior, «porque ello demuestra que tienen un alto valor añadido. En ocasiones, se magnifica la capacidad de influencia de las decisiones políticas, pero lo que está claro es que hemos apostado por una diversificación, por una protección del tejido comercial y fomentar al máximo el sector industrial».
El acto académico se inició con una conferencia del consejero delegado de Analistas Financieros Internacionales, Emilio Ontiveros, al cual siguió un debate sobre el modelo de desarrollo económico de Balears, que moderado por Eugeni Aguiló, contó con la participación de Javier Rey Maqueira, Carles Manera, Carlos García Delgado y Lorenzo Mulet.
Respecto a la influencia o no de las decisiones políticas, Sampol dijo que las administraciones públicas pueden enviar impulsos para conseguir unos objetivos políticos, «tal y como ha sucedido con las restricciones urbanísticas, el cambio del modelo turístico con una clara apuesta por la calidad y la diversificación, de ahí el objeto del impuesto turístico, que pretende rehabilitar zonas turísticas, recuperar fincas, paisaje y adquirir muebles urbanos, todo ello para fomentar el turismo cultural y la naturaleza», puntualizó.