El número de accidente de trabajo en Balears se situó en los diez primeros meses del año en los 24.850, lo que supone una disminución del 6'5 por ciento (1.731) sobre los que se registraron el pasado año, según explicó ayer el conseller de Treball i Formació, Miquel Rosselló.
Respecto a los siniestros mortales, durante este año han fallecido cuatro trabajadores frente a los veinte del año pasado y los doce del 2000. A esta alturas de año, los accidentes graves han llegado a los 183, es decir, un 31'7 por ciento menos que en el 2001, y los leves alcanzaron los 24.663, un 6'2 por ciento menos.
El conseller de Treball expresó ayer su satisfacción porque la cifras absolutas de finales de año podrían ser mucho más positivas que las de anteriores. En concreto, si entre enero y octubre de este año los accidente en el trabajo se situaron en los 24.850, en el 2001 fueron 26.581 y 26.083 en el 2000.
Mientras tanto, el número de accidentes por cada mil trabajadores se situó entre enero y octubre de este año en 77'9, una cantidad diez puntos por debajo de los 87'2 siniestros del 2001 o los 89'8 del 2000.
El índice que se está registrando este año, destacó el conseller Rosselló, se asimila a los índices de 1997, cuando se registraron 74'6 accidentes por cada mil empleados en las Islas. El conseller se refirió a la necesidad de continuar trabajando en la prevención y en el estricto cumplimiento de la actual legislación actual. Los resultados de la campaña del Govern en contra de la siniestralidad laboral «comienza a ser positiva», manifestó Rosselló, que recordó el «esfuerzo» económico que está realizando el Pacte de Progrés respecto a la anterior legislatura.