La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, acusó ayer a sus socios del PSM y Unió Mallorquina de pretender bloquear la tramitación del proyecto de Ley de Biodiversidad con la presentación de un total de 126 enmiendas, que modifican sustancialmente el texto aprobado por el Govern. «Estos cambios se hubiesen podido plantear antes, y no ahora; todos los partidos se llenan la boca de protección del medio ambiente, pero al final se oponen a aprobar la Ley de Biodiversidad», criticó indignada Margalida Rosselló al conocer que UM ha presentado 80 enmiendas y el PSM, otras 46, que modifican sustancialmente el proyecto inicial. Para la titular de Medi Ambient, la intención de sus dos socios de gobierno es «boicotear».
«Estas enmiendas han sido presentadas con nocturnidad y alevosía, pero cuando nosotros presentamos modificaciones a la Ley de la ecotasa nos machacaron todos los partidos del Pacte», recordó Rosselló. La consellera de Medi Ambient lamentó que, después de más de dos años de debate, sus socios del Pacte hayan aprovechado el tramo final de la tramitación para plantear enmiendas a uno de los proyectos estrella del Govern. «¿No había tiempo antes para presentar las propuestas?», cuestionó Rosselló.
En los mismos términos se manifestó el diputado verde Joan Buades, quien acusó a PSM y UM de promover «un misil nuclear» en contra de la Ley de Biodiversidad. «El PSM ha tenido un ataque de celos antes de su congreso; quieren demostrar que son los más ecologistas del Pacte, pero se niegan a votar una ley que nos situaría a nivel europeo en protección de medioambiente», declaró Buades. Sobre la postura de Unió Mallorquina, Buades cree que los nacionalistas «han quedado retratados». «Nosotros vamos a escuchar, negociar e intentar llegar a acuerdos», prometió el diputado verde, quien no descarta que, a partir de ahora, Els Verds también puedan presentar enmiendas al proyecto de Presupuestos que está tramitándose.