La Conselleria de Treball i Formació prevé que la Comunitat Autònoma concluirá el año con una tasa de paro superior al 9 por ciento y con una cifra de trabajadores y trabajadoras desempleados que rondará, e incluso podría superar, las 30.000 personas inscritas en las oficinas de empleo. Tal y como ha reconocido el director del Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB), Pere Mascaró, las cifras de octubre hacen pensar que la tendencia del paro en 2002 es «bastante parecida» a la de 1998, año que concluyó con 32.167 parados en diciembre, una tasa de paro del 9'4 por ciento y una media anual de parados de 24.794 personas en las Islas.
De hecho, la tendencia a la baja del paro, que comenzó en 1999 con 29.346 parados en diciembre; una media anual de 21.832 inscritos en las oficinas de empleo y una tasa del 8'2 por ciento de parados al concluir el año, sólo fue superada en el año 2000 con una tasa del 8'0 por ciento y desde entonces se ha vuelto a certificar "con las estadísticas en la mano" una tendencia al incremento del número de trabajadores y trabajadoras en paro.
Pere Mascaró sostiene que el hecho de que se haya adelantado el cierre de la temporada turística también ha supuesto un adelanto de las personas que están acudiendo "con una media de más de 2.000 personas por día" a las oficinas de empleo para inscribirse como demandantes de empleo y solicitar, si les pertenece, poder cobrar sus prestaciones. Y ese adelanto del número de parados en octubre es lo que, estadísticamente, hace preveer que 2002 concluirá con un número de trabajadores en paro que rondará los 30.000 desocupados con una clara tendencia al alza.