PATRICIO CANDIA. Enviado especial a
Bruselas.
Según responsables de España en la UE, con un 'cielo único europeo'
se acabarán los retrasos aéreos en las islas Baleares, que se
convertirán de este modo en las grandes beneficiadas de un centro
de control común. Los expertos en navegación aérea de la Unión
Europea (UE), entre ellos José Manuel del Pozo, representante de
Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), afirman que la
entrada en vigor del 'cielo único europeo' (con un centro de
control común para todos los países comunitarios) previsto para el
año 2004 «beneficiará enormemente a Balears».
Señalan, en ese contexto, que las Islas no tendrán retrasos en sus conexiones aéreas y que mejorará el servicio a los pasajeros y aumentará la eficacia del sistema de transporte aéreo. Actualmente hay más de 40 centros de control en toda Europa, lo que implica que un avión que realiza la ruta Bruselas"Ginebra, por ejemplo, tenga que cambiar de frecuencia nueve veces antes de llegar a su destino. El ejemplo a seguir para los expertos comunitarios es Estados Unidos, país donde sólo existe un número pequeño de centros de control.
«Con un 'cielo único', Balears mejorará su capacidad de espacio aéreo, de los aeropuertos, reducirá los retrasos... Por tanto, los aviones van a aterrizar y a despegar con puntualidad. Sin duda alguna, será un beneficio increíble para los ciudadanos de Balears», explicó del Pozo. El representante de AENA, que además es piloto de avión y controlador aéreo, explicó el momento actual del proyecto denominado «cielo único europeo» en una conferencia dirigida a los periodistas de Catalunya y Balears que visitan la capital belga, y en la que también intervino Fernando de Esteban, director general adjunto de la Dirección general de Energía y Transportes.
En la retina de los expertos están, por ejemplo, las imágenes de cada verano en los aeropuertos de Palma, Eivissa y Menorca, con miles de pasajeros atrapados en las terminales por los conflictos de los controladores aéreos. En la capital de la UE se tiene la impresión de que el sistema aéreo empieza a presentar síntomas de saturación, y como ha reconocido la vicepresidenta de la Comisión Europea y Comisaria de Transportes, Loyola de Palacio, el pasado año uno de cada cuatro vuelos llegó con retraso.