Los inquers más pequeños sacaron, en la tarde del pasado sábado, su moda para este invierno a la calle. Un gran colorido y la ropa casual, vaquera y desenfadada protagonizaron el tradicional desfile de moda de otoño-invierno infantil que se celebra todos los años en el marco de las ferias previas al Dijous Bo.
Pequeños pero resultones. Unos, avergonzados; otros, un poco asustados; algunos, muy divertidos, y todos, muy graciosos. Los pequeños modelos pasearon por la pasarela, al son, eso sí, de la música de los chicos de la academia de «Operación Triunfo», la ropa de media docena de tiendas de moda infantil de la ciudad.
El desfile, que tuvo lugar en la plaza Llibertat al aire libre, registró una gran afluencia de público, que se divirtió de lo lindo observando la gracia de los más pequeños sobre la pasarela. Colores chillones como rojos, verdes, amarillos, azules... mezclados y muy revueltos serán el ultimo grito en la moda infantil de esta temporada y darán un toque desenfadado para romper con la monotonía del gris y frío invierno. Asimismo, al igual que en el armario de adolescentes y mayores, lo casual y vaquero también será imprescindible en el armario de los más pequeños que quieran estar a la moda.
Sin embargo, para los bebés y aquellos que prefieran pasar con más desapercibidos, conviene decirles que los tonos azul celeste, marfil y blanco se siguen llevando.
En cuanto a prendas, en ropa de niña abundaron las faldas y los pantalones, camisetas, jerséis y abrigos de cortes muy femeninos. En los niños, la ropa de abrigo sigue estando dominada por chaquetas cortas y pantalones, camisas y jerséis, todos muy deportivos.