El teatro siempre es una puerta abierta a la magia. Estudi Zero lo sabe y por eso ha organizado una serie de funciones matinales de «Torna al teatre i volta al món» para los colegios de Mallorca en el Municipal. El resultado no ha podido ser más positivo: unos 2.000 niños han acudido en masa para conocer las aventuras de Bámbola y la bailarina. Los alumnos Armando, Javi, Àlex, José Ramón y Fatu salían el jueves pasado de ver la obra con una expresión viva de alegría.
Se notaba que lo habían pasado bien. «Torna al teatre...» es una obra muy dinámica, que nunca aburre. Los actores Mónica Fiol, Pau Cirer y Laura Dalmau recorren los cinco continentes en busca de aventuras y se encuentran con numerosos personajes exóticos. Las leyendas hindúes, los cuentos árabes, las narraciones centroeuropeas, la commedia dell'arte, las fábulas griegas, los cuentos de la China y la Conchinchina, son repasados de forma efectiva. Los niños quedan muy sorprendidos cuando aparece el dragón o el genio de la lámpara maravillosa.
En unos 15 días han pasado unos veinte colegios: Pius XII, Col.legi Públic Maria Antònia Salvà, Sant Francesc, Lluís Vives, Monjón, La Salle del Pont d'Inca, Residencia Son Tugores, Col.legi Públic de Pràctiques, Itaca, Sant Vicenç de Paül, Col.legi Públic Establiments, Col.legi Públic Son Ferriol, Bartomeu Ordines, Eugeni López, Col.legi Públic s'Indioteria, Col.legi Públic Xaloc, Col.legi Públic es Molins y Col.legi Públic Ses Bassetes.
Según Pere Mestre, director de la obra, «es una pieza escénica que tiene dos lecturas, una para niños y otra para mayores». En efecto, en «Torna al teatre...» salen personajes tan dispares como un tal Grosske o Catalina Cirer. Son guiños de humor político que los más pequeños no captan, pero sí sus padres. Dice la actriz Lourdes Erroz, encargada del vestuario de la obra, que «no olvidemos que también se han hecho sesiones por las tardes y que los mayores también tienen que divertirse. La obra tiene unos recursos sencillos, pero que colocan al espectador en escenarios geográficos diferentes. Ello hace que el niño no pierda la atención».