El presidente del Govern, Francesc Antich, y el conseller de Treball i Formació, Eberhard Grosske, firmaron ayer con representantes de la CAEB, Pime-Balears, UGT y CC OO el documento «Un nou impuls al Pacte per a l'ocupació, la cohesió social i el foment de l'economia productiva a Balears» tras la reunión que mantuvieron en el Consolat de la Mar. «El documento ahora aprobado es extraordinariamente importante y viene a ser la continuación natural del Pacte per a l'ocupació firmado en enero de 2000», dijo Grosske, para añadir: «Además, los agentes sociales y el Govern hemos recogido en este documento muchas de las propuestas presentadas por el Consell Econòmic i Social para afrontar los retos de la nueva coyuntura económica».
Entre las futuras actuaciones previstas, Grosske destacó la construcción de residencias públicas para la tercera edad en Menorca e Ibiza, así como la puesta en marcha de diversas medidas para asegurar el futuro del sector agrario, la desestacionalización del turismo, el apoyo al comercio o el abaratamiento del precio del suelo. «El documento es una guía de actuación de las medidas consensuadas por los agentes sociales y el Govern», prosiguió Grosske, quien señaló que en una próxima reunión se definirá la aportación presupuestaria.
Las primeras medidas se empezarán a aplicar en 2003, «aunque todavía es posible que alguna se inicie este año», dijo. «Serán los consellers quienes a partir de ahora se dirigirán a los agentes sociales para indicarles cuáles podrían ser las primeras acciones a abordar», señaló. Por último, Grosske indicó que la mayor dotación presupuestaria se dedicará al ámbito social, a áreas como sanidad, educación o bienestar social.