El Consell de Mallorca se ve obligado a ampliar las estaciones de transferencia de residuos que funcionan en la Isla ante el incremento de la producción de basuras en general y de la recogida selectiva en particular.
A excepción de la de Calvià, que es la más reciente, las demás estaciones de transferencia (donde se separan los residuos antes de ser trasladados a la incineradora, al vertedero o a las plantas de reciclaje) serán ampliadas. Se trata de las estaciones de Campos, Manacor, Binissalem y Alcúdia. La inversión necesaria es de 3 millones de euros y será incluida en la propuesta de modificación del Pla Director de Residus, que el conseller ejecutivo de Medi Ambient i Natura del Consell, Miquel Àngel Borràs, presentará el próximo noviembre.
Borràs destacó que «la recogida selectiva ha aumentado en el último año un 44 por ciento ».