La Misericòrdia acogió ayer la segunda feria de libros y cómics viejos. En la primera edición acudieron cerca de 1.400 personas, ayer llegaron a 2.000, lo que demuestra el tremendo éxito de este evento, que se consolida. Y ha sido posible gracias a la gran demanda de los ciudadanos y de los vendedores, que querían un certamen de este tipo en Palma.
En este encuentro, los cómics que más se han vendido han sido los españoles, pudiéndose ver desde «El jinete fantasma» (cómics que son difíciles de encontrar), hasta el ya clásico Capitán Trueno.
Todos coincidieron en que lo que atrae a las personas del cómic antiguo es que el estilo de dibujo es diferente, es menos oscuro, y también, cierta nostalgia, al ver cómics que leímos en nuestra niñez y nos hacen recordar tiempos pasados, los cuales siempre vemos como mejores. El hecho de que la mayoría de los vendedores fueran particulares (49), y solo hubiera tres librerías hizo que no se disparan los precios. Otras actividades fueron: música con artistas callejeros, cuentacuentos, talleres de cómics en los que se explicó su proceso de elaboración, juegos de estrategia y un debate titulado: «Mesa redonda de los elfos en la Edad Media», en el cual se debatió el papel de estos en los libros de Tolkein.