El 59 por ciento de los ingresos que obtuvo la Comunitat Autònoma en 2001 llegó vía impuestos, lo que sitúa a Balears en el puesto número uno por lo que a financiación vía impuestos se refiere. Según los datos obtenidos a través del Informe de Comunidades Autónomas de 2001 del Instituto de Derecho Público, tan sólo una comunidad sigue de cerca a Balears, Madrid, cuya financiación vía tributos fue del 56'7 por ciento. De lejos sigue Canarias, con un 33'4 por ciento de sus ingresos vía impuestos.
En el lado contrario de la balanza se encuentran las comunidades consideradas más pobres. De los ingresos totales que consiguió Extremadura en 2001 sólo el 8'4 por ciento llegaron a través de impuestos. Muy cerca de Extremadura se encuentra la comunidad de Castilla-La Mancha, con una financiación vía impuestos del 9'4. En este listado, el tercer puesto por la cola lo ocupa Andalucía, comunidad que obtuvo un 10'3 por ciento de los ingresos totales gracias a los impuestos.
El porcentaje de ingresos vía impuestos es inversamente proporcional al que se consigue a través de transferencias. En este capítulo es Andalucía la comunidad que se lleva la palma, con un 77'3 por ciento de los ingresos por esta vía. Castilla-La Mancha, con un 73'2 por ciento, ocupa el segundo puesto, y Extremadura y Galicia comparten el tercer puesto con un 70'1 por ciento de ingresos vía transferencia.
Y si son las comunidades pobres las que más ingresos logran gracias a las transferencias, son las supuestamente ricas las que logran menos recursos. Madrid tiene que conformarse con un 30'2 por ciento de sus ingresos por este apartado. Balears es la segunda, con un 33'4 por ciento de los ingresos totales gracias a transferencias. Algo más lejos se sitúa la tercera comunidad autónoma, Asturias, con unos ingresos vía transferencia del 41'9 por ciento. Las tres comunidades ni siquiera llegaron a la media estatal, estimada en el 55'9 por ciento del total.
Las conclusiones que se extraen de estos dos modelos de financiación son claras: las comunidades que reciben menos transferencias del Estado, como Balears, Madrid y Asturias, deben recurrir a los impuestos para conseguir ingresos. Sin embargo, son las comunidades que reciben más transferencias las que después tienen más presupuesto per cápita. Es decir, que las transferencias son determinantes para que las comunidades consigan más o menos ingresos en sus presupuestos.
Otra comparación interesante es la que se refiere a las inversiones. A pesar de los problemas financieros de la Comunitat, obligada a recurrir a los impuestos para financiarse, Balears destinó el año pasado el 16'2 por ciento de su presupuesto total a inversiones directas. En este apartado Balears sólo fue superada por Asturias (25'2 por ciento destinado a inversión), Cantabria (23'2 por ciento) y Castilla-León (16'8 por ciento).