Un melón de Muro de 17.270 gramos hizo historia ayer en Vilafranca. Su propietario, Josep Forner Gual, se llevó el primer premio, 120 euros, del concurso del melón más grande en la categoría de los no locales. Este ejemplar es uno de las más grandes pesados en la historia de esta convocatoria, que este año cumplía su 32 edición.
Eran muchos los comentarios de que no se había visto nada igual. El primer premio para el melón local más grande, 180 euros, fue para Pere Nicolau Morlà, con un ejemplar de 12.960 gramos. Asimismo, también se estrenó un nuevo concurso, el del melón de calidad. Este año, ha sido la convocatoria en la que se han presentado menos melones a causa del mal tiempo.
En el concurso del melón de calidad había dos categorías: calapoter y claudio. Los ganadores fueron Miquel Sansó y Esteva Xim, respectivamente. El regidor de fiestas, Joan Bauçà, destacó la importancia de este concurso. «Se trata de potenciar la calidad de los productos». El jurado tuvo en cuenta, a la hora de escoger el mejor ejemplar, el aspecto exterior, el gusto, el aroma, el color de la pulpa y la pulpa.
En el concurso del melón más grande, se presentaron un total de 11 y los de Muro fueron los grandes triunfadores, puesto que se llevaron tres de los cinco premios.
La feria contó con una gran participación. Tanto el concurso como el resto de actividades programadas fueron seguidas por un numeroso público. Había una amplia oferta en los puestos, donde se podían encontrar desde productos gastronómicos típicos, cerámica, bisutería, así como una muestra local de ganado, perros ibicencos, razas autóctonas y agricultura ecológica.